Lorenzo Nobili, de Roma y Pablo Artoni, de Milán, son dos hombres italianos que llevan varios años viviendo en la capital navarra. Junto a Aritz Aranguren y Mónica Barrero, hace algo más de 3 años decidieron abrir una pizzería y cervecería artesana en su barrio.
Tanto Lorenzo Nobili como Aritz Aranguren se dedicaban a la cerveza artesana en la empresa EH Bier Koop, en el polígono industrial Berriainz, Aizoiain. Junto a Pablo Artoni, cocinero, y la ayuda de Mónica Barrero pudieron encontrar un sitio en el que vender su cerveza.
Se trata de la pizzería y cervecería Malatesta, situada en la Avenida de Villava, número 80, en el barrio de la Chantrea, Pamplona. Es un establecimiento que está muy cerca de otros que hemos visto en esta sección de comercio local, como la pastelería Miravalles, donde los bollos 'vuelan' y la gente llama para reservarlos.
En ella, las pizzas artesanas que ellos mismos elaboran no son redondas, sino que son 'pizzas al corte' (horneadas en grandes bandejas rectangulares y vendidas al corte por peso). Además de ser elaboradas con productos ecológicos y de kilómetro cero, dejan fermentar las masas durante 72 horas. Cada poco tiempo varían la carta para introducir nuevas opciones.
"Nos gusta trabajar con productores locales. Trabajamos con un pastor de Ezcaba que hace quesos artesanos, para la carne también. Además, nosotros elaboramos aquí muchas cosas. Hacemos pastrami (elaborado con carne roja sometido a un proceso de salazón en salmuera), también pan, que mucha gente viene solo a por él. Este año vamos a realizar panetones", explica Lorenzo Nobili.
Por ejemplo, tiene una gran aceptación la pizza de seis quesos (mozzarella, straciatella, grana padano, gorgonzola, brie y scamorza) y la que lleva salchicha fresca, mozzarella, scamorza, tomate y aceite de trufa. Su precio es 7€ el corte.
Además de las pizzas, destacan sus fritos. como el de berenjena y parmesano o la bola de jamón y parmesano, por 2,50€. Así como sus fingers caseros de pollo con 2 salsas. Su precio es 10€. En Malatesta también ofrecen al cliente 'pizzatxos'. Son triángulos de pizza fritos y horneados con guacamole, frijoles, queso y jalapeños, y cuestan 12€.
Todos estos manjares elaborados en el propio local se pueden acompañar de la cerveza artesana que ofrecen. La caña cuesta alrededor de 3€, y es una buena opción para compaginar con la comida casera que ofrecen en esta pizzería y cervecería.
Además, para finalizar la velada, no hay mejor forma de hacerlo que con sus exquisitos postres. Tanto el brownie, como su exótico 'birramisú' y la tarta de queso son una excelente opción para disfrutar de un toque dulce en el local.
Debido a esta amplia variedad en su oferta, Malatesta está teniendo un gran éxito. "En la Chantrea nos han aceptado muy bien, y en Pamplona también. Cada vez la gente se anima más a probar cosas nuevas, y están bajando más clientes para conocernos", asegura Lorenzo Nobili.
Los cuatro socios se muestran muy contentos de ello. "Entre los socios y los trabajadores somos como una familia. Hemos creado muy buena sinergia. Lo pasamos bien, aprendemos entre nosotros y estamos muy contentos después de 3 años", expresa el italiano dedicado al mundo de la cerveza artesana.
Y, también, de la zona elegida. "Para mí, la Chantrea es uno de los mejores barrios de Pamplona. Yo vine de Roma directamente a este barrio, y es un sitio espectacular. Además, esta plaza en la que estamos nos gusta mucho a los cuatro", asegura.
Malatesta abre los jueves y viernes de 18 horas a 12 de la madrugada, y los sábados y domingos de 12 de la mañana a 12 de la madrugada. Además, presentan una agenda cultural y cada mes aproximadamente organizan conciertos, sesiones de dj o exposiciones de fotos que alternan.
