El alcalde Joseba Asirón ha defendido que la ikastola Jaso es un edificio privado y que el desalojo requiere autorización judicial.
El alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, ha asegurado este miércoles que el desalojo de la antigua ikastola Jaso “está judicializado” y que su posible derribo corresponde al consorcio del PSIS de la zona.
“La pelota no está en el tejado del Ayuntamiento”, ha recalcado, subrayando que es necesario que desde los juzgados se emitan las autorizaciones pertinentes “para evitar problemas a futuro”.
Respecto a los conflictos que se han producido en este inmueble ocupado por personas que pernoctan en su interior, Asiron ha explicado que el Consistorio “está haciendo lo que puede hacer”.
En este sentido, ha recordado que desde agosto se ha establecido una vigilancia constante de Policía Municipal en la zona para garantizar la tranquilidad, además de la intervención de la policía comunitaria y de los trabajadores de calle para favorecer la integración de los ocupantes.
El alcalde ha insistido en que existen dos factores que no dependen del Ayuntamiento: “la judicialización del asunto” y el hecho de que se trate de un edificio privado. “Para poder proceder a un desalojo del edificio hace falta sí o sí la autorización de un juzgado, cosa que de momento no tenemos”, ha apuntado.
Sobre un futuro derribo, Asiron ha precisado que “estaría en manos del consorcio del PSIS de la zona, que no pertenece tampoco al Ayuntamiento y que es en última instancia quien tiene que adelantar el dinero para el derribo”.
El primer edil ha concluido remarcando que la responsabilidad no recae sobre el Ayuntamiento de Pamplona y ha insistido en la necesidad de que el juzgado dé los pasos necesarios para desbloquear la situación.
