Un menor del Centro de Observación y Acogida (COA) de Marcilla ha sido detenido este martes como presunto autor del incendio que se originó en una caseta del patio del centro.
El fuego, que se declaró a las 17:32 horas, fue sofocado rápidamente por los bomberos del Parque de Peralta, con apoyo de patrullas de la Policía Foral, sin que finalmente se registraran heridos. El menor, acusado de un delito de daños, ha sido trasladado a Pamplona y el Gobierno de Navarra, como tutor legal, ha asumido la responsabilidad por los daños.
El suceso ha tenido lugar en un contexto ya tenso en la localidad, donde crecen las críticas por la presencia del centro en el antiguo convento de las Madres Concepcionistas.
En los últimos meses se han sucedido incidentes y altercados relacionados con algunos de los menores acogidos. El más grave se produjo en junio de 2025, con una "batalla campal" entre residentes del COA y vecinos, con lanzamiento de piedras y sillas, que terminó con 19 personas identificadas por Policía Foral y Guardia Civil.
El malestar vecinal ha sido patente, con manifestaciones multitudinarias como la del 15 de junio, en la que entre 1.300 y 3.500 personas reclamaron el cierre del centro bajo el lema "¡Marcilla dice basta!". Los residentes denuncian robos, vandalismo y acoso, y señalan que Marcilla, con 3.000 habitantes, carece de medios para gestionar una infraestructura que ha llegado a acoger hasta 94 menores, más del doble de su capacidad original de 40 plazas.
Ante esta situación, el Gobierno de Navarra tomó la única medida del del traslado de 23 menores a otros centros en junio y la prevista reubicación de otros 25 en una nueva instalación en Pamplona (Ilundáin). También se ha reforzado la seguridad con presencia policial y vigilancia con drones. Sin embargo, el personal del COA ha denunciado falta de recursos y de profesionales cualificados, y han advertido de la presencia de menores con trastornos de salud mental sin la atención adecuada.