Los pueblos de Navarra acogen con verdaderas ganas las escasas actividades culturales que se organizan durante el verano. No todo son fiestas, piscinas, vacas y comidas, que no está mal ni mucho menos, pero conviene de vez en cuando alguna iniciativa que alegre las tardes-noches del caluroso mes de agosto.
Uno de los teatros que recorre las localidades navarras es 'Próspero Teatro', una compañía con sede en la localidad de Acedo, que se dedica a ilusionar a los chavales y a hacer reír a los mayores. Nunca defraudan, aunque se trate de una modesta compañía.
Andrés Fresno dirige la compañía. Tiene 60 años y es natural de Argentina: "Mis abuelos eran españoles e italianos y hace 28 años que estoy aquí en España". Estudió en Buenos Aires y allí se dedicó luego al mundo del circo.
En el año 1990 llega a España donde funda la compañía 'La Lona' con giras por Europa y luego crea 'Prospero Teatro' en 2011: "Próspero es el nombre de mi padre y hacemos teatro, circo y talleres para toda la familia". Leire Catalá y el joven Unai completan el grupo y van sumando gente a sus espectáculos, tanto en castellano como en euskera.
Andrés trabaja en Traperos de Emaús por las mañanas haciendo una sustitución en verano y actúa por las tardes. Si les sale una actuación matinal acuden Leire Catalá y Unai.
Trabajan durante todo el año: "Ahora en verano estamos en fiestas de pueblos como Zúñiga, Los Arcos... y el resto del año damos clases de circo y teatro en Estella, Vitoria, Maeztu, Ancín y actuaciones en sala". También van al País Vasco, Burgos y La Rioja. En invierno acuden a locales cubiertos en localidades como Cárcar.
"Estamos contentos. Llevo 40 años dedicándome a esto en los festivales más importantes de España durante 28 años. Es lo único que sabemos hacer bien y a esto me dedico toda la vida", señala con una gran sonrisa el fundador de la compañía de teatro.
"Estudié mucho teatro, dirección. Todos los textos del cuentacuentos son nuestros. Sacamos para vivir pero hay que moverse, promocionarse y hacer las cosas con buena calidad. Tienes que gustar", concluye Andrés Fresno.
Leire Catalá Alonso tiene 26 años y es de Estella: "Cuando acabé la universidad me enteré que había clases de circo en Estella y conocí a Andrés. Me dijo que trabajara con él para hablar en euskera. Empecé y aquí llevo dos años. Estoy muy contenta y me gusta mucho".
"En verano vamos por los pueblos y en invierno actuamos y damos clases en bibliotecas, centros cívicos y casas de la juventud. Nos conoce cada vez más gente. También viene Unai de 16 años que está empezando en esto del teatro pero por la edad no podía trabajar", asegura Leire.
"No me hubiera imaginado acabar haciendo esto, pero es muy bonito. Vas de pueblo en pueblo, conoces a mucha personas y la gente es muy agradecida. Ves a los padres y a los chavales que están muy atentos a todo. Es muy gratificante", concluye Leire Catalá.
