Los religiosos de esta orden comparten una residencia en el barrio de Santutxu en Bilbao, junto a un colegio. En este equipamiento vivían unas 15 personas,
El Gobierno habilitó esta medida para aquellas empresas que, por causa de fuerza mayor, han debido cesar su actividad tras la declaración del estado de alarma.
La zona se ha adecuado para actuar como depósito "provisional", que por sus dimensiones se consideran "suficientes" para "la situación de excepcionalidad del momento".
El vehículo, en el que iban cuatro niños de entre 2 y 9 años y un bebé de 15 días, tenía la ITV caducada, llevaba una rueda pinchada y los faros rotos.