La Comparsa de Gigantes ha entrado a las 11.45 horas a la iglesia, donde ha sido recibida con un fuerte aplauso por parte de todas las familias y niños que ahí les esperaban.
Javier Leóz, párroco de la iglesia, ha destacado que "un portador de un gigante es lo mismo que el alma para una persona". "El alma da el habla a una persona, al igual que un portador hace que un gigante baile y hable", ha señalado.
Ha sido el último acto institucional del Año Jubilar de San Fermín. En el lugar han entrado todos los portadores y, rodeados de aplausos, han realizado dos bailes.
La lluvia ha hecho acto de presencia en los Sanfermines marcando la mañana de este sábado 8 de julio, en la que el sol y el agua se han relevado para 'fastidio' de muchos pamploneses y visitantes.
Muchos no sabían si salir a la calle con el paraguas o echar mano de una visera; lo cierto es que ambos complementos han tenido que ser utilizados en esta jornada.
El viento también ha hecho de las suyas a lo largo del día, como lo atestiguan algunas de las imágenes que los cientos de fotógrafos acreditados para las fiestas han podido tomar.
En cuanto a la Comparsa de Gigantes y Cabezudos, este sábado ha tenido que retrasar su salida desde la estación de autobuses ante la inclemencia del tiempo.
Finalmente pasadas las 10 de la mañana y cuando el cielo se ha abierto, la comparsa ha iniciado su recorrido por Pamplona que se ha visto interrumpido en torno a las 14 horas.
Cuando el agua ha vuelto a amenazar con caer sobre Pamplona, los gigantes y cabezudos han puesto fin a su marcha festiva refugiándose en la plaza de toros.
Aprovechando que el sol volvía a salir, los personajes más animados de los Sanfermines han salido de la plaza y han vuelto a prisa a la estación de autobuses, esperando regresar con mejor tiempo este domingo.
Algunos han aplicado el dicho de al mal tiempo, buena cara y han aprovechado la lluvia para disfrutar de unos momentos de menos masificación en las calles de Pamplona.
Y como suele decirse, después de la tormenta llega la calma y el sol ha vuelto a lucir en la capital navarra, para disfrute de muchos que siguen apurando el fin de semana sanferminero.
Así es como posaron, sin moverse un milímetro, algunos de los miembros de la Comparsa de Gigantes y Cabezudos de Pamplona durante el día de San Saturnino.
Lo hicieron tras despedir a los Gigantes y a los Cabezudos, que no volverán a pisar la ciudad hasta 2017. La forma, original y muy de moda, se resolvió gracias a un 'mannequin challenge'. Se trata de una técnica en la que se intenta recrear una foto con movimiento o un vídeo sin él.
Puedes verlo aquí.
La peña Oberena ha recibido este lunes la visita de la Comparsa de Gigantes y cabezudos de Pamplona en su local de la calle Jarauta. Como regalo, la presidenta de la peña Ruth Izcue les han colocado un pañuelo rojo dedicado con el título "Oberena 75 aniversario" a los gigantes y cabezudos.