El Gobierno de Navarra ha comenzado a enviar unas invitaciones en las que equipara la violencia de grupos de extrema derecha con las actuaciones policiales.
La audiencia que se ocupa del caso ha llegado sentenciado que los agentes han aumentado el trauma de la víctima y han incumplido las normas de confidencialidad.
Una testigo acudió a la policía local a declarar que había visto a un hombre portando un bulto del que sobresalían unas zapatillas y lo metía en un coche.
Tres agentes de la Policía Local de Sevilla han tenido que ser atendidos al verse cercados por unas 200 personas; un menor de 16 años ha sido detenido.
Los jueces creen que los acusados sólo expusieron su voluntad de asaltar un depósito de drogas, pero que fueron inducidos por el agente encubierto a llevarlo a cabo.
"Tenemos al hombre equivocado", habría señalado la Policía de la capital, que ha incidido, en que por tanto el verdadero autor del ataque seguiría fugado y podría ser peligroso.
El hombre huyó del local cuando los clientes advirtieron de que iban a llamar a la policía. La hoja del cuchillo tenía una dimensión de 18 centímetros.
“¡Matad al perro! ¡Matadlo, que si no me mata él a mí”, gritó el propietario a la policía cuando llegó para auxiliar al joven con mordeduras por el cuerpo.
Organizado por el Sindicato Unificado de Policía, el torneo de fútbol ha recogido productos de primera necesidad para el Banco de Alimentos de Navarra.
Bildu anuncia que sacará de nuevo a concurso el edificio para que siga siendo utilizado como Gaztetxe y los 'okupas' puedan volver a usar el chalé municipal.
El detenido, que acabó con un traumatismo craneoencefálico y dos fracturas, asegura que fue agredido brutalmente después de haberse dirigido a una agente como "mi reina".
La Policía Nacional se había personado en una vivienda por el ruido generado cuando algunos asistentes al enlace empezaron a lanzarles objetos violentamente.
Disfrazarse de payaso diabólico y exhibir objetos peligrosos con ánimo intimidatorio está prohibido, al igual que vestirse de policía y hacer un uso indebido del uniforme.