- miércoles, 22 de octubre de 2025
- Actualizado 10:56
Si para ser político hace falta tener un cinismo bastante elevado, para ser un político del nacionalismo vasco lo de ser un cínico en grado superlativo es indispensable. Un político nacionalista vasco tiene unos niveles de cinismo tan potentes que podría poner él solo otro Tesla en órbita.
El pasado 17 de agosto, por desgracia, Barcelona copaba todas las portadas de medios internacionales del mundo. Desde Le Monde pasando por The Telegraph o Al Jazeera retransmitían en directo cómo una furgoneta arrollaba en las Ramblas de Barcelona a centenares de personas y mataba a trece de ellas.