Una localidad navarra tiene la costumbre "de siempre" de comenzar sus fiestas patronales sin lanzar el tradicional Chupinazo o cohete, en contra de lo que es habitual en casi todos los pueblos de nuestra Comunidad Foral.
Es una localidad que apenas supera los 100 habitantes, situado en el centro del valle del Ega en Tierra Estella. Hace pocas fechas fue noticia por el cubrimiento de su frontón y por la invitación de una pareja del pueblo a todos los vecinos para comer.
Está muy cerca de un valle navarro conocido como 'la pequeña Rusia' y de un Camping que tiene un gran éxito en la población de Acedo.
Las celebraciones se abren a las 15 horas con una pochada popular al aire libre en el parque. Posteriormente, a las 17 horas, llega el momento de la ronda copera por las calles. A las 19.30 horas es la cita con la ofrenda floral a la virgen de Belén en la iglesia parroquial de San Martín.
El Chupinazo o cohete se lanza a las 20 horas, cinco después de comenzar la fiesta, desde el balcón del Ayuntamiento. Tampoco tienen la costumbre de designar como lanzador del mismo a una persona o institución que haya destacado por algo, sino que lo tira el alcalde tras un breve pregón.
Encarna Martínez es periodista de Rne Navarra natural de Legaria. Explica la costumbre de lanzar el cohete: "A las 10 de la mañana hay almuerzo en el bar, aunque no sale en el programa oficial, así que son más de cinco horas de diferencia".
"Es una tradición de siempre. Somos un pueblo de calle, social y nos gusta relacionarnos. Ni la política ni las rencillas personales afectan a nada. Hemos estado todos en la pochada del parque, de una ideología y de otra, de un tractor y de otro...", señala.
"Yo tengo 62 años y siempre lo he vivido así. A las 8 se lanza el Chupinazo con el bandeo de Campanas. Destacaría las actividades y la participación del pueblo en todo con las comidas y cenas en el chabisque y en el bar, donde nosotros preparamos todo. Este año hay sardinada y chistorrada el domingo de fiestas, como siempre, con jotas y a echar la siesta por que ya no podemos más".
Hay cinco días festivos, este año del jueves 10 al lunes 14 de agosto. "El lunes hay bingo en la plaza que sale todo el pueblo y el ayuntamiento invita a tostadas con aceite de Legaria e invitan a panceta. Somos pocos, pero siempre hemos sido más que el resto de pueblos del valle", asegura Encarna Martínez.
Fran Martínez López, concejal del Ayuntamiento de Legaria, ha sido el autor del pregón festivo. "El alcalde ha prendido la mecha del cohete ya que se despide y yo también. Hace un montón de años que lanzamos el cohete a las 20 horas, pero estamos de juerga desde las 3 de la tarde.
"Tanto yo como el alcalde, Javier Echeverría, nos despedimos y ha sido un poco emotivo. La palabra clave es compromiso por el pueblo porque no hay relevo en el ayuntamiento. A ver si hay gente joven que venga. Llevo 16 años y llega el momento de dejarlo", asegura.
"El lunes es un día extra que a nivel de dinero no supone nada porque no nos gastamos nada. Se hace en plan popular con una macarronada y no hay gastos a nivel de orquestas. Estamos los de casa pero son cinco días en vez de cuatro", concluye Fran Martínez.
