UPN ha acusado a María Chivite de “desatender la sanidad en la Ribera”. Según el partido foralista “lejos de mejorar, vemos cómo continúa el desmantelamiento del Hospital Reina Sofía de Tudela”.
Así, han denunciado que “servicios sanitarios básicos como la presencia de radiólogos y urólogos de guardia siguen sin cubrirse con normalidad, lo que repercute en la atención sanitaria que reciben los 100.000 navarros y navarras que dependen de este centro hospitalario”.
“Esta situación, que no es nueva, no es coyuntural ni fruto de la casualidad, sino consecuencia directa de la falta de planificación, de gestión y del abandono político al que Chivite está sometiendo a la Ribera”, han señalado desde UPN.
Los regionalistas han advertido de que sigue la falta de especialistas en el Hospital de Tudela, en el que no habrá radiólogo de guardia los días 8, 10, 16, 22, 24 y 28 de agosto y tampoco habrá urólogo de guardia los días 1, 2, 3, 11, 14, 15, 16, 17, 18 y 25 del mismo mes, una situación que “dura ya muchos meses” y que consideran “intolerable en un hospital comarcal de referencia”.
Según han explicado, la ausencia de radiólogos de guardia obliga a trasladar en ambulancia a pacientes con situaciones urgentes hasta Pamplona – 100 km de ida y 100 km de vuelta – con el consiguiente retraso en el diagnóstico y la intervención médica, ya que “más del 80 % de las decisiones clínicas se basan en pruebas radiológicas. Si no hay radiólogo, no hay atención sanitaria de calidad, ni segura”, han recalcado.
En cuanto a la falta de urólogos, han subrayado que “el hecho de que no haya un urólogo de guardia durante uno de cada tres días al mes demuestra el abandono absoluto al que el Gobierno de Navarra ha condenado al sur de la Comunidad foral”, han criticado.
UPN considera que “todo esto es reflejo de un deterioro estructural en el Hospital Reina Sofía que se viene agravando desde 2019”. “Faltan radiólogos y faltan urólogos, pero también faltan médicos de otras especialidades, porque el Gobierno de Chivite no ha sabido garantizar unas condiciones dignas y estables para atraer y retener profesionales”, han criticado.
Por ello, desde el partido foralista exigen al Departamento de Salud “la cobertura inmediata de las guardias de agosto y un plan serio para revertir el déficit de especialistas”. “Es inadmisible que los 100.000 vecinos y vecinas de la Ribera paguen con su salud la pasividad del Ejecutivo de Chivite. No se puede seguir jugando con la salud de los riberos y riberas como si fueran ciudadanos de segunda”, han sentenciado.