El mapa electoral de España se ha teñido casi por completo de azul. El Partido Popular se ha impuesto en las elecciones europeas celebradas este domingo con bastante holgura en todas las regiones autónomas. En todas menos en tres: el País Vasco, Cataluña y Navarra.
El PSOE de los pactos con los herederos de ETA ha ganado unas elecciones nacionales en Navarra por segunda vez consecutiva y la explicación hay que buscarla en las razones que han llevado al centro derecha a dividir el voto en Navarra en las dos últimas convocatorias electorales.
Como se recordará en las últimas elecciones generales del pasado mes de julio, tras el aviso de las autonómicas de sólo un mes antes, el PSOE fue la lista más votada y consiguió dos diputados y tres senadores, frente a un diputado y un senador de UPN y un diputado del PP.
La errada decisión de concurrir por separado a las elecciones posibilitó el triunfo al PSOE en número de votos, porcentaje y escaños y cargar de razones a Chivite para pactar con los proetarras de Bildu, el nacionalismo vasco más recalcitrante y los populistas de extrema izquierda el Gobierno de Navarra.
Y en estas elecciones europeas la historia a vuelto a repetirse. La derecha ha concurrido dividida con UPN desentendiéndose por completo de la convocatoria electoral y sirviendo en bandeja de plata a Chivite la posibilidad de decir que los resultados de las europeas son el refrendo a sus nefastas políticas en salud, empleo, industria o educación.
El hecho de que el expresidente de UPN, Javier Esparza, se negara a concurrir a las elecciones generales en julio con el Partido Popular por sus problemas personales con Sergio Sayas y Carlos García Adanero, y que dejara como herencia no sólo la decisión de no presentarse a estos comicios europeos, sino también la de no pedir el voto para el PP ha vuelto a brindar otro triunfo a los socialistas.
UPN se dedicó en la campaña electoral a reclamar como propios los votos que cosechara el PP, en lugar de pedir el voto de sus afiliados y simpatizantes para la opción que más se asemeja a sus ideas.
A falta de la lectura de los resultados de las elecciones europeas por parte de los partidos del arco parlamentario foral, parece una evidencia que la decisión de UPN de ni siquiera comparecer a estas elecciones (que debería ser la razón de ser de un partido político) ha perjudicado al mapa sociopolítico de Navarra provocando la desmovilización del voto de UPN y la victoria del partido de Pedro Sánchez en Navarra, tiñendo de rojo el territorio foral en los mapas de resultados electorales.
Recordemos que los socialistas han conseguido 74.705 votos, mientras que los populares se han quedado en 72.788. En tercera posición ha quedado la coalición radical que aglutina a EH Bildu, con 48.674, mientras que VOX ha sido la cuarta fuerza en Navarra con 17.215 votos. Sumar y Podemos siguen la lista de partidos más votados en Navarra con 9.999 votos y 8.383 votos respectivamente. Geroa Bai se ha quedado con 8.217 votos y la agrupación "Se acabó la fiesta" ha conseguido 7.957 votos.
