La primera victoria en casa fue celebrada de principio a fin igual que un título. El fútbol le debía una a El Sadar y en el partido 31 de Liga se la pagó con el segundo triunfo consecutivo, tercero de la temporada.
Siovas adelantó a los madrileños en la primera parte, pero los de Vasiljevic le han dado la vuelta al resultado y consiguen la segunda victoria consecutiva.
Raúl García tuvo el 0-3 a bocajarro. Con solo disparar al frente le valía, pero tras unas décimas de segundo, quizás, de confusión mental, lanzó el balón fuera. A los pocos minutos le sustituyó Valverde.
Osasuna ha competido durante muchos minutos, pero los goles de Aduriz y de Williams deciden el resultado. Sergio León le dio emoción a los minutos finales.
Los jugadores tiraron al final de casta para empatar un partido que aburría a los muertos, y el público les agradeció que después fueran a por la victoria con todo, desinhibidos.
"Entre nuestro portero y algún centro impreciso hemos sacado el empate", reconocel el entrenador del Eibar, que ha acabado pidiendo la hora en Pamplona.
Los goles de Soriano, Soldado y dos de Santos Borré dejan en evidencia a un pobrísimo Osasuna, que solo pudo marcar de penalti por medio de Roberto Torres.
Los dos defensas han ingresado en la Clínica Universidad de Navarra: el de Osasuna para ser operado y el del Madrid para comprobar el alcance de la contusión.
Los rojillos lucharon, pero apenas mordieron. Solo en acciones aisladas e individuales. Los blancos, en cambio, marcaron en su primer tiro a puerta y sentenciaron al dar un paso adelante.