- viernes, 11 de abril de 2025
- Actualizado 11:16
Cientos de personas han acompañado al Santísimo por las calles de Pamplona en la procesión del Corpus Christi tras dos años sin celebrarse. Se han dispuesto tres altares en el recorrido y en la marcha ha participado el arzobispo Francisco Pérez, así como corporativos de la ciudad, como el alcalde Enrique Maya.
Pamplona ha vuelto a vivir la procesión del Santo Entierro, la cita ineludible de Viernes Santo en la Semana Santa pamplonesa después de dos años de suspensiones por la pandemia. Desde la Hermandad de la Pasión, los pasos han recorrido las principales calles del Casco Antiguo con un destacado silencio y rodeados de cientos de fieles.
El buen tiempo y el fin de la mayoría de restricciones ha sacado a la calle a cientos de familias de Pamplona, que han participado en el Domingo de Ramos. Todas las parroquias de Navarra han conmemorado la entrada de Jesús en Jerusalén, aunque la más numerosa ha sido la celebrada en el plaza del Arzobispado. El arzobispo Francisco Pérez ha bendecido las palmas y ramos y la comitiva ha caminado después hasta la catedral, donde se ha celebrado la misa mayor.
Una multitud ha acompañado en Pamplona a la Virgen Dolorosa desde la iglesia de San Lorenzo hasta la Catedral acompañada de los Cofrades de la Hermandad de la Paz y la Caridad que han sido los encargados de portar el paso a través de la calle Mayor, San Saturnino, Plaza Consistorial, Mercaderes y Curia. A pesar de la lluvia, los pamploneses han podido volver a disfrutar de un acto suspendido el año pasado por la pandemia.
El acto de Consagración de Rusia y Ucrania al Corazón Inmaculado de María se ha llevado a cabo este viernes en Pamplona con una procesión que ha partido de la Plaza del Arzobispado y ha culminado en la catedral con un texto que el Papa ha enviado a todos los obispos del mundo con el fin de pedir a Dios por intercesión de la Virgen la paz.
El arzobispo de Pamplona fue uno de los primeros en adherirse a la iniciativa de organizar una celebración unida a los deseos del Papa Francisco, en cuyo transcurso de la misma se ha llevado a cabo una gran colecta en favor de Ucrania.
La Hermandad de la Pasión de Pamplona ha vivido este miércoles de ceniza el primero de sus actos de la Cuaresma con el traslado del Cristo Alzado hasta la Catedral. El acto ha discurrido entre la sede de la Hermandad de la Pasión de la calle Dormitalería y la seo pamplonesa y la imagen ha sido llevada por 20 portadores. Se trata de uno de los primeros actos de Semana Santa de todo el país y el primero en la capital navarra desde 2020. El paso del Cristo Alzado permanecerá en la catedral pamplonesa hasta el día de Viernes Santo para participar en los Vía Crucis que celebra la Hermandad de la Pasión todos los viernes de Cuaresma. La Hermandad de la Pasión ya ha comunicado que retoma todos los actos para esta Semana Santa de 2022.
El paso del Cristo Alzado ha sido trasladado este miércoles a la catedral de Pamplona. El cortejo procesional ha contado con el Hermano Guión; un grupo de mozorritos; el propio paso, que ha sido llevado a hombros por 20 portadores; la bandera de la Hermandad de la Pasión; el abanderado; y las porta-borlas. Este año, como novedad, el paso ha presentado mejoras, como las almohadillas regulables en altura y el sistema de iluminación por cera líquida, que reduce los residuos. Con este traslado, la Hermandad de la Pasión inicia sus actividades de Cuaresma.
Los pamploneses honran a su patrón por las calles de la ciudad con su tradicional procesión y misa: CRÓNICA
La Coral "Canta et yanta" entona la jota a San Fermín durante la procesión del domingo 7 de julio de 2019, bajo la dirección del director Jesús Martínez. Desde 1994 acuden cada 7 de julio a la curva de la calle San Antón con el paseo de José Joaquín Arazuri para honrar al santo patrón.
La procesión, en la que han participado casi 2.000 personas entre figurantes y porteadores, ha partido a las 19.30 horas desde los locales de la Hermandad de la Pasión. Tras la marcha, la imagen de la Dolorosa regresará desde la Catedral hasta su capilla en la parroquia de San Lorenzo.
Un año más, el Ayuntamiento de Berriozar, gobernado por EH Bildu, ha vuelto a protagonizar el sinsentido de no incluir en el programa de las fiestas patronales ni la procesión, ni la misa en honor a San Esteban, patrón del pueblo y principal motivo de la celebración de dichas fiestas.
Sin embargo, una multitud de personas han decidido continuar con la tradición y han realizado tanto la procesión como la misa en honor al santo. La procesión ha salido a las 11 de la mañana de la iglesia de San Esteban.