Los goles de Soriano, Soldado y dos de Santos Borré dejan en evidencia a un pobrísimo Osasuna, que solo pudo marcar de penalti por medio de Roberto Torres.
Osasuna titubea, esconde su personalidad y naufraga. Resulta difícil saber a qué quiso jugar en Villarreal, donde pudo salir escaldado si el equipo local no se da por satisfecho con sus tres goles.
El portero Mario Fernández fue sustituído al descanso por lesión y debutó en Primera el guardameta del filial Álvaro Fernández; Martín agotó los tres cambios para el minuto 53 ante el desbarajuste del equipo.