El alcalde de Tudela, Alejandro Toquero (UPN) ha mostrado su indignación y el malestar de la ciudad de la Ribera con la decisión de María Chivite y el consejero de Salud, Fernando Domínguez (Geroa Bai) de cerrar la UCI del Hospital Reina Sofía.
Esta medida obligará al traslado en situaciones de máxima gravedad y urgencia a pacientes hasta Pamplona. "Llevamos tres días recibiendo en cascada noticias que son completamente intolerables", ha expresado Alejandro Toquero ante la gestión de la sanidad pública en Navarra.
La situación en Tudela, ante la supuesta falta de facultativos, se suma a la medida de Chivite de obligar a las mujeres de Tierra Estella a acudir a Pamplona a dar a luz, ya que se ha cerrado también el servicio de partos y ginecología del Hospital García Orcoyen.
Toquero ha desvelado que a estas dos gravísimas situaciones se ha sumado el cierre desde el viernes pasado del Instituto de Salud Pública en Tudela. "Han dicho que hasta nueva orden no habrá servicio".
"Es insostenible la situación actual pacientes que se tienen que trasladar a 100 km a la UCI. Y me imagino también la angustia de las mujeres embarazadas en Estella. Hay que encima de la mesa la gravedad de la situación, ya que en el caso de Tudela supone un riesgo en la vida del paciente que esté grave y al que se le retrasa el tratamiento adecuado", ha afirmado Toquero.
El alcalde de Tudela ha instando al departamento de Salud del Gobierno de Navarra que a aumentar de urgencia las plazas estructurales de médicos en el servicio de la UCI de Tudela, para que se pueda prestar un servicio adecuado a las necesidades de la población. Además, ha resaltado que parte de la atención ginecológica de Estella también se va a derivar a Tudela, lo que va a mermar la atención por la presión asistencial. "Es una situación insostenible", ha expresado.
Toquero ha considerado que el Gobierno foral tiene que abordar cuanto antes la falta de especialistas en Tudela, no sólo en la UCI, sino también en el atención primaria de la ciudad para revertir la situación. "Tienen que definir ya las plazas que nadie quiere ocupar o que son de difícil cobertura para dotarlas con incentivos económicos curriculares o cualquier otro tipo de bonificación para que sean atractivas y los profesionales quieran venir a quedarse. La situación no es tolerable y hay que denunciarla", ha concluido el alcalde de Tudela.
