El mítico bar de un pueblo de Navarra que ha reabierto con gran éxito siendo fiel a su esencia
El local volvió a abrir sus puertas en diciembre del año pasado, y su amplia carta de comida y vinos ha atraído a muchos clientes.

Carlos Lezáun, de 40 años, y Beatriz Barañán, de 35, son una pareja que en diciembre de 2024 reabrió un bar mítico de un pueblo de Navarra. Él nació en Olite, y ella en Alcañiz (Teruel), y escogieron la comunidad foral para iniciar su proyecto.
Para ello, no tuvieron dudas cuándo supieron que un conocido bar buscaba nuevos dueños. Lezáun posee experiencia en el mundo de la hostelería, y al ser la primera vez de Barañán en el mundillo, supone un reto, pero lo está "disfrutando mucho".
Se trata del bar El Mesón El Sol, situado en la plaza Carlos III El Noble de Olite, pueblo de Carlos Lezáun, y en el que ambos residen. Es un establecimiento que está muy cerca de otros que hemos visto en esta sección de comercio local, como el restaurante Casa Zanito, o el asador Erriberri. Ambos reabrieron también en los últimos meses.
"Olite es un lugar maravilloso. Tiene turismo, gente local con mucho cariño por su pueblo, y un ambiente que anima a disfrutar de la buena gastronomía y del buen vino", expresa Beatriz Barañán.
En el bar, la pareja ofrece una carta de picoteo informal muy variada. En especial, destacan sus hamburguesas al estilo smash. Como, por ejemplo, la 'Leonor' (doble de carne smash, queso brie, cebolla caramelizada, beicon, huevo frito y salsa smokey baconnaise), o 'Las 3 Coronas' (triple de carne smash 100% vacuno, queso cheddar, edam, cebolla morada y salsa hannibal), ambas por 15€.
Los bocadillos del El Mesón El Sol también están teniendo un gran éxito. Entre ellos, destaca el 'Carlos III' (chistorra navarra con huevo frito y pimientos), y también 'El Portal' (lomo, beicon, queso y tortilla francesa). El precio de los dos es 8€. Al igual que su gran variedad de pinchos.
En el bar reabierto también se pueden disfrutar de ricas ensaladas, raciones y tablas de embutidos. Y una parte de la carta está dedicada a productos navarros. Su chistorra, ajoarriero, espárrago y pimientos del piquillo son opciones ideales para aquellos que quieren disfrutar de lo mejor de la gastronomía foral. Todo ello se puede acompañar, además, de una selección de excelentes vinos. Muchos de ellos, del pueblo.
"Si tuviese que definir El Mesón El Sol de una manera sencilla, diría que es un sitio con encanto especial, con con buen ambiente, comida rica y vinos excelentes", expresa Carlos Lezáun.
Para finalizar la comida, no hay mejor forma de hacerlo que con sus postres. Su gofre con nutella, nocilla blanca y nata, por 6,50€, su cuajada de Ulzama con nueces y miel (4,50€), o su queso de roncal con nueces, que cuesta 5,50€, son la mejor forma de acabar la comida con un toque dulce.
De esta forma, El Mesón El Sol de Olite ha comenzado una nueva andadura con buen pie. "La aceptación de los clientes ha sido muy buena. La gente ha respondido con cariño, y es algo que agradecemos mucho", expresa la propietaria.
"Lo mejor de llevar el bar es trabajar con buena gente, reírnos y ver a los clientes disfrutar y que vuelven. Nuestro objetivo es seguir creciendo poco a poco, mejorando cada día. Y, sobre todo, disfrutando de este camino junto a Carlos", concluye Beatriz Barañán, propietaria del bar El Mesón El Sol de Olite junto a su pareja, Carlos Lezáun.