No corren buenos tiempos para el empleo en Navarra. Al cierre anunciado de la fábrica de BSH en Esquíroz, y a los problemas que atraviesa la autobusera Sunsundegui, se añade la noticia de que 255 trabajadores de Siemens Gamesa en Navarra se irán al paro. Son datos de este jueves, 19 de diciembre después de que se diera por cerrada la Mesa de Empleo que la parte sindical de la empresa mantenía con la dirección.
A pesar de que en un principio Siemens planteaba 423 despidos, finalmente serán 255 los trabajadores que se vean afectados por un expediente de regulación de empleo, dado que se ha conseguido recolocar en áreas de expansión de Siemens Energy al resto.
Los 255 trabajadores dejarán de pertenecer a Siemens Gamesa a partir del próximo mes de enero.
La parte social asegura que en el proceso de reestructuración se han evitado despidos traumáticos gracias a las soluciones alternativas negociadas con la empresa.
La plantilla ha conocido los acuerdos este mediodía en una asamblea que ha tenido lugar en el centro de trabajo y donde se les ha informado de que se ha alcanzado un acuerdo a nivel estatal que ha afectado a la unidad productiva de multiplicadoras. Los centros afectados son Asteasu, Lerma, Burgos y oficinas de Zamudio; en total, una plantilla de 426 personas.
Este acuerdo ratifica el compromiso de la empresa con el mantenimiento en el empleo en esta unidad de negocio, que durante un año y medio previsiblemente va a ver reducida su capacidad productiva.
Asimismo, la compañía anunció la venta de una parte de la unidad eléctrica (electrónica de potencia) a la multinacional ABB. La venta afecta a las plantas de Valencia y San Fernando y a un pequeño colectivo de las oficinas de Gamesa Electric en Zamudio. En total, son unas 400 personas que serán subrogadas en la operación que se formalizará previsiblemente a mediados de 2025. Esta operación, asegura el sindicato CCOO, "permite a la plantilla afectada seguir creciendo y desarrollándose".
Clara Fernández, responsable de la sección sindical de CCOO en Siemens Gamesa, ha señalado que “hemos sido partícipes, a través de los contactos institucionales, a que la empresa se comprometa a no cerrar ningún centro productivo en España y seguiremos defendiendo, en la negociación del ERE, que no exista ningún despido traumático”.
