Osasuna, con un calendario muy apretado de cara a la final de Copa, salió al Nuevo Mirandilla dispuesto a todo, pero pensando en el conjunto de partidos que se le vienen encima.
Por fin Budimir. Con una salida presionante del equipo en todo el campo, que sorprende a los verdes, Osasuna hace dos goles de Budimir que deja boquiabiertos a los sevillanos y casi se quedan sin respiración.
Título del encuentro: “ABDE”, manejo de balón, ABDE; tiros a gol ABDE; regates de uno contra uno ABDE; goleador ABDE; dueño del encuentro ABDE. El resto ayudando a sufrir.
Doscientos partidos al frente de Osasuna, son muchos partidos, pero merecidos y ganados a pulso. Tu lema inicial, Jagoba, sigue siendo tan válido como entonces: hay que ponerse la pilas.
El caso Negreira nos ha servido de apoyo para sacar todo lo que llevamos dentro y un poco más. Es verdad que a ello hemos colaborado todos, desde distintos niveles y a cualquier precio.
Partido interesante e importante (a priori) el que se ha disputado en el Sadar. El interés lo marcaba la igualdad de los dos equipos y la importancia de conseguir los tres puntos que a ambos les hacía falta para lograr sus objetivos.
De nuevo un partido con expectativas para uno y otro equipo, especialmente para los valencianos que andan por la parte baja y pelean para salir a flote y muy interesante para Osasuna con expectativas por la parte alta de la clasificación.
Después de las emociones de la Copa, volvemos a la rutina de la Liga que sigue siendo muy importante hasta que no pasemos de los 40 puntos, pero con la tranquilidad de que faltan 42 por jugarse.
A otros semifinalistas parece que les pasó factura pensar tanto en su semifinal, no así a Osasuna. Los que salieron al campo nos dieron una gran sesión de futbol.