Uno de los cinco acusados ha expresado que fueron "un infierno todos los meses vividos en la cárcel" y ha agradecido a la sociedad que "creyera en nuestra inocencia".
Las condenas oscilan entre uno y dos años de cárcel, las multas suman hasta 240.000 euros y el pago de las responsabilidad civil a la Hacienda Tributaria hasta 395.000 euros.
La fiscalía ha mantenido su petición de multa de 2.700 euros, mientras que la defensa lo compara con casos donde prevaleció la "libertad de expresión".
El Colectivo ha argumentado que nadie puede gestionar ni mantener ocultas a las Fuerzas de Seguridad del Estado armas pertenecientes a una organización terrorista.
La mujer habría llegado a embolsarse 483.981,28 euros que ahora deberá indemnizar a la entidad bancaria para la que estuvo trabajando hasta 2015, cuando se descubrió la estafa.
"Inocentes hay muchos en la cárcel y no queríamos ser uno más", ha señalado Ramón Morcillo, secretario general de RCN-NOK y futuro presidente de la entidad.
El juez de la Audiencia Nacional también observa en el auto que "el escrito del interno guarda cierta equidistancia con las víctimas a las que ni siquiera menciona".
Está procesado por su implicación, junto a otros dos hombres, en un acto en el que se colocó una pancarta con la imagen del etarra y el texto "Amnistía".
Los tres encausados, miembros de una misma familia de nacionalidad rumana, le amenazaron reiteradamente con publicar una supuesta fotografía comprometedora.
Señala que prevalece la libertad de expresión y que no se puede considerar "la existencia de ninguna intromisión ilegítima en el derecho al honor de los demandantes".