- martes, 01 de julio de 2025
- Actualizado 20:36
Confieso a los lectores que siento mucha vergüenza al comenzar a darle al teclado, imagino que parecida vergüenza a la sentida por una mayoría de españoles ante el sinsentido de los partidos y de sus dirigentes, que parecen estar jugando al ajedrez sin tener ni idea sobre cómo se juega a eso.
Junto al vasco Iñigo Urkullu fue el gran vencedor en la noche electoral del pasado domingo. Su tercera mayoría absoluta consecutiva en Galicia le catapulta a ser el relevo natural de su paisano Mariano Rajoy, cuando este tenga a bien, o las circunstancias le obliguen, dar un paso atrás y dejar la presidencia del PP, cosa que de momento no parece probable.
La portavoz de Podemos Navarra, Laura Pérez, participó en un festival de jota, bertso y rap celebrado en Peralta. Las imágenes fueron grabadas y ofrecidas por Ahora Zona Media y la grabación completa puede verse en este enlace.
La cita fue organizada por la asociación Mujeres con memoria. El festival pretendía que "el bertsolarismo, la jota y el rap se unieran de forma natural".
La de Podemos es la historia de un éxito. El éxito de un grupo de profesores que fue capaz de dar una estructura a las protestas del 15-M consiguiendo en dos años un importante poder institucional, empezando en el Parlamento Europeo y siguiendo en municipios, comunidades autónomas y las Cortes Generales.
Fracasada la investidura de Rajoy, parece evidente que el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, va a intentar conformar en las próximas semanas una mayoría parlamentaria liderada por él con lo que viene llamando las "fuerzas del cambio", donde supuestamente caben todos los partidos menos el PP.
Circula por ahí un manifiesto sensato, pero tardío. Demanda una coalición de gobierno de centro-izquierda-derecha integrada por PSOE, Podemos y Ciudadanos respectivamente, con el fin de desalojar al PP del gobierno, en el que lleva cuatro años más casi otro de propina haciendo de las suyas.
“Bienvenido al desierto de lo real”, con esta frase, Morpheo, abre los ojos a Neo cuando le descubre cual es el mundo en el que realmente viven, y no esa ensoñación que les brinda Matrix. Ese mundo paralelo donde nada es lo que parece, y que quienes parecen aliados no son más que elementos puestos por unos intereses particulares para hacernos ser felices.