- martes, 29 de abril de 2025
- Actualizado 09:27
Pese a dejarse dos puntos en Elche, el equipo de Arrasate resultó reconocible y transmitió mejores sensaciones.
Un punto de 21 posibles. Otra inapelable derrota en El Sadar, más colistas. El comisario político puede explicarlo en otra superproducción de su macro equipo, “Un ‘centenario’ triunfal”, de nuevo con el ‘factotum’ de protagonista estelar.
¿Han oído hablar de ella? Se llama así a la generación que han sido padres más tarde que la anterior y se ve en la necesidad de cuidar de sus hijos todavía pequeños y de sus padres ya mayores. Como nombre es un churro, pero como concepto es claro.
El equipo de Arrasate ha mutado su estilo de juego, de jugar la pelota ha pasado a sortearla al patadón. Así le va. En Pucela pudo ganar, pero perdió.
No importa tanto el hecho de que Osasuna no llegara a entre los tres palos de Joel durante todo el partido tanto como la sensación de agotamiento que mostró el equipo, caído ya a los puestos de descenso.
El Barça se reencontró con el fútbol ante un endeble cuadro rojillo, que con cinco defensas regaló a los azulgranas todas las facilidades para su lucimiento.
En manos de un chalado que razona así está la portavocía de Psoe en el parlamento de Navarra.
Osasuna jugó para empatar, y gozó incluso de más ocasiones para ganar que el Sevilla. Sin embargo, cayó víctima del fútbol tecnológico que en otras ocasiones le ha beneficiado.
Fermín J. Alonso es concejal delegado de Proyectos Estratégicos, Movilidad y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Pamplona.
Lo mejor es que Osasuna compitió con personalidad frente a un equipo, el Atlético, de potencial muy superior. Los rojillos tuvieron sus opciones, pero los colchoneros poseen más argumentos para imponerse.
Lo mejor es que Osasuna compitió con personalidad frente a un equipo, el Atlético, de potencial muy superior. Los rojillos tuvieron sus opciones, pero los colchoneros poseen más argumentos para imponerse.
Osasuna solo tiró una vez a puerta, en el penalti del gol de la victoria. El resto del partido se dedicó a defender, afortunadamente ante un equipo, el Bilbao, que no supo atacar. Así salvó el Club la fecha que ha elegido para celebrar su centenario.
“Deja que todo te suceda: la belleza y el terror. Solo sigue adelante. Ningún sentimiento es definitivo”, es lo que dice Rainer Maria Rilke en su Libro de las horas. Quizás los sentimientos no, pero su huella sí que lo es
Empate prácticamente a todo entre dos equipos que podrían jugar entre sí con los ojos cerrados de tanto que se conocen, que chocaron y alternaron momentos de dominio sin marcar diferencias notables, estaban condenados al empate sin goles.
No sé si empezar la Sabatina citando a Calamaro, a Kamala Harris o a mi padre, fíjense en qué punto estoy, lo que tengo claro en esta semana de vaivenes es que hay que apostar por valores perennes, y la honestidad es uno de ellos.
Como cada mañana, Sísifo se levantó aún de noche, en su taza del capitán Haddock se puso un café y se sentó en su escritorio a empujar la roca, que es mi izquierdita, de nuevo ladera arriba.
Un zapatazo de Facundo Roncaglia rompió la igualdad del choque de trenes en el centro del campo, en un partido con pocas ocasiones y que Osasuna apuntaló el cansancio rival
Vaya semana lleva Madrid. Desobedece, se enfrenta, no se cuida. Madrid como si fuera un ente único, cuando es mucho más. Manía con apropiarse de lo intemporal por aquellos que son temporales. Ese no es mi Madrid, ni el de muchos.
El Levante desnuda a Osasuna, que paga muy caro la falta de apoyo de su jugador número 12 y cae merecidamente en su regreso a El Sadar. Hay tiempo para rectificar.
Los dos equipos jugaron a lo mismo en la primera parte, pero los de Bordalás supieron dar un paso adelante después, mientras los de Arrasate carecieron de plan B.
El otro día escuché que se referían así a los niños que están padeciendo los efectos de la pandemia, y a los que han nacido en ella. Me parece fatal que además de amargarles la vida, les pongamos un nombre para que no se les olvide. No puede ser que sólo vivamos para el bicho.
En el Ramón de Carranza lee, hasta quien no quiere, que “quien está contra el Cádiz, está contra la humanidad”. Pues, eso. Osasuna, ganó merecidamente “contra la humanidad”
Y yo pensando que parar en verano era buena idea porque pasaban pocas cosas, pues menos mal. Lo cierto es que todo el revuelo de verano vuelve en septiembre y estamos igual que en junio, decidiendo entre la bolsa o la vida. O igual es que esa es la única decisión. Bienvenidos de nuevo.
Crítica del concierto ofrecido el domingo 30 de agosto en el auditorio de Baluarte por Chano Domínguez, dentro del ciclo de conciertos de Flamenco on Fire.
Crítica del concierto ofrecido el viernes 28 de agosto en el auditorio de Baluarte por Farruquito, dentro del ciclo de conciertos de Flamenco on Fire.