Equipos como el Getafe deberían desaparecer del fútbol mundial. Si encima los árbitros les apoyan y el equipo rival cae en su rastrero planteamiento y el entrenador no lo remedia, mejor no ir al fútbol.
Los árbitros han llegado a un punto, parece que de no retorno, donde amparan y potencian el antifútbol y fomentan la desconexión con los equipos de la segunda parte de la tabla.
A lo largo de los partidos que vaya jugando Osasuna, daré una opinión de lo que me ha parecido el encuentro, sin meterme en datos, que terminan siendo farragosos, sino en lo que he percibido viendo cómodamente las idas y venidas de unos y otros, aportando aspectos tácticos y estratégicos que puedan ser entendidos por cualquier aficionado.
Partido muy parecido al de la primera vuelta. Entonces ganó el Getafe, que apostó más tras el descanso. En esta ocasión reaccionó Osasuna, pero no tiró a puerta hasta la prolongación. Un fiasco horroroso.
Los dos equipos jugaron a lo mismo en la primera parte, pero los de Bordalás supieron dar un paso adelante después, mientras los de Arrasate carecieron de plan B.
Partido calcado al de la primera vuelta, con doscientas pérdidas de balón y 40 faltas, juegotrabado y sin tiros a puerta. Osasuna neutralizó al Getafe y viceversa.
La "rajada" completa de José Bordalás contra Jagoba Arrasate tras el empate (0-0) entre Getafe y Osasuna en el Coliseum Alfonso Pérez. Domingo 10 de noviembre de 2020.