El dato provisional de ingresos por tarifas abonados por los usuarios suma un total de 10.239.860,45 euros, lo que supone un descenso del 46,29% respecto al año anterior.
La Mancomunidad indica en un comunicado que la reducción del servicio nocturno en un 70% se ha decidido tras el decreto del estado de alarma y toque de queda.
El objetivo es garantizar la transición hacia un futuro más sostenible para el transporte urbano, a fin de reducir el uso del automóvil y las emisiones del transporte.
Se mantiene la prohibición de pagar con efectivo y el uso de la tarjeta se realizará, como hasta ahora, en la canceladora que hay detrás del conductor.
Las autoridades del transporte público y operadores nacionales han mandado una carta al ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, reclamando esta obligatoriedad.
La presidente de la Mancomunidad ha adelantado medidas para este año como ampliar el servicio nocturno o las paradas a demanda, así como una inversión de 5,4 millones para adquirir más autobuses híbridos.
En el caso del servicio nocturno, se realizará la última expedición (ida+vuelta) de cada línea para garantizar la realización de los desplazamientos finales de la jornada.
El aparcamiento de Trinitarios tiene 180 plazas y el acceso se realiza por la entrada existente en la glorieta de intersección de la calle Biurdana con la avenida de Guipúzcoa.
Desde el mes de octubre, este servicio había quedado suspendido debido a la renovación tecnológica de parte del Sistema de Ayuda a la Explotación e Información (SAEI).
Transporte Urbano Comarcal se ha coordinado con la Policía Municipal de Pamplona para establecer unos servicios acordes a las demandas de los ciudadanos estos días.
ELA ha exigido "un estudio serio y pormenorizado al respecto ya que podrían cambiar los horarios de las paradas, y es algo que los usuarios deben conocer".
"Estamos empezando a instalarlos como una fase experimental pero esperamos que para finales de este año esté activo en todos los sistemas", explican desde TUC.
Diez autobuses lucirán, tanto en su lateral como en su parte trasera, una imagen a modo de “collage” que engloba a doce Denominaciones de Origen de Navarra.
Entre otros asuntos, se controla el nivel de ruido y se recuerda a todos los viajeros que una vez cerradas las puertas el chófer no recogerá a más personas en la parada.