Osasuna y Real Madrid ofrecieron espectáculo del bueno, entretenimiento en estado puro. Victoria justa blanca con un once no habitual pero capaz de ganar la Liga.
Osasuna ha perdido (1-3) este miércoles ante el Real Madrid y rompe su buena racha como local en el estadio de El Sadar, después de tres triunfos consecutivos ante el Villarreal, Levante y Alavés. Puedes leer la crónica en este enlace.
Osasuna ha vuelto a sentir el calor de la afición rojilla jugando en el Sadar frente al equipo meregue. Si has estado allí viendo el partido, búscate en las gradas.
Un Osasuna rosáceo, increíble, en la floresta de la primavera levantina, junto a la playa de la Malvarrosa, se impuso con autoridad ante el Valencia de Bordalás.
Cuando parecía que Osasuna ya no iba a disputar ningún partido con su tercera equipación, el equipo rojillo ha decidido darle por fin una oportunidad a la elástica alternativa.
Disputar un partido en el Nou Camp para un jugador de cualquier club debe ser atractivo y estimulante por todo lo que rodea al mismo, gran estadio, mucho público y jugadores del más alto nivel, aunque Osasuna lo de “estimulante“ lo dejó en Pamplona.
Parecía que hubieran hablado los dos entrenadores de que debía hacer para frenar al contrario en un partido que parecía condenado al empate. Un gol de rebote premió a los realistas, que disfrutaron así de viento a favor para mantener la ventaja.
Nuevo año para la esperanza rojilla de continuar en esta gran liga de futbol. Último partido de la primera vuelta contra un equipo como es el Athletic que nos hace y le hacemos sufrir siempre y esta vez no iba a ser menos.
Osasuna ha conseguido este domingo un espectacular triunfo en Villarreal (1-2) con goles de Torró y el Chimy Ávila. Además, han conseguido batir su récord de victorias consecutivas fuera de casa, al sumar 4 triunfos seguidos en las primeras jornadas de la competición. Puedes leer aquí la crónica completa: Imbatibles como visitante: Osasuna arranca otra gran victoria ante el Villarreal.
La segunda unidad se comportó. La apuesta resultaba arriesgada, pero cumplió con victoria. En fútbol mandan los resultados y, por tanto, Arrasate tuvo razón. Para la historia el golazo de Iñigo Pérez.
Los rojillos fueron engullidos por el Betis con sumo gusto, como casi siempre. Espabilaron tras el primer gol verdiblanco y se descompusieron con el segundo. El ‘chichi’ solo lo pusieron en medio.