Ubicado en la calle Santo Domingo, el emblemático restaurante sale a la venta por jubilación. Está completamente equipado, con cocina profesional, terraza y almacén en planta superior.
Gestiona entre 30 y 40 pedidos diarios para llevar, sin perder la esencia del trato cercano. "Eso sí, quien viene al restaurante es bienvenido", asegura.
Dicen que la suerte no se busca, sino que se encuentra. Y hay lugares donde parece instalarse de forma permanente. Uno de esos puntos mágicos está en un pequeño bar de un barrio popular de Pamplona donde el bullicio cotidiano convive con el inconfundible...
En los desayunos, la tortilla de patata con alioli es un éxito rotundo y se agota en minutos. "También nos encargan muchas tortillas para llevar", añade.
Se hizo con la victoria en la Semana del Pincho en 2023, y en la 25ª edición de la competición, tratará de volver a alcanzar el objetivo con su pincho "Krines de fuego".
Este conocido local del popular barrio de Pamplona era muy demandado por los clientes a primera hora de la mañana por su apertura cuando otros bares estaban cerrados.
"El cachopo fue un descubrimiento. Es lo que más me piden. También hago callos, ajoarrieros, estofados… Me gusta cocinar bien y se nota en la respuesta de la gente".
Hasta 58 establecimientos de Pamplona y diferentes puntos de Navarra participarán en esta 25ª edición de la semana gastronómica referente en la Comunidad foral.
"En la barra nunca falta nuestra tortilla de patata con oreja, el ajoarriero casero con huevo, los pinchos de bacon y panceta, los callos, los morros o las cazuelicas", aseguran.
La Policía Municipal de Pamplona ha denunciado al local de ocio por superar ampliamente el aforo permitido, permitir fumar en su interior y vender alcohol a menores.
Destacan los fritos caseros de croqueta, gamba y pimiento. Las cazuelicas de ajoarriero, manitas de cerdo y callos, además de las ensaladas y las hamburguesas.